Mazinger Z Low poly - Impresión 3d

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Así es. Este Mazinger Z está hecho con impresión 3d. En la página de la persona que lo diseñó dice que siempre quiso tener un juguete de Mazinger y gracias a la impresión 3d pudo cumplir su sueño. Gracias a que compartió su diseño en la web yo también pude tener el mío.

Impresora 3d no tengo, pero tuve la suerte de encontrar en mi ciudad alguien que los vendía. Me aventuré a comprarlo desarmado para poder disfrutar de la experiencia de armarlo. En una bolsa venían todas las piezas listas para ensamblar. O al menos eso pensé.

En la bolsa vienen todas las piezas sueltas, a excepción de los conectores que están en otra bolsa. El Pilder y los cuernos también tienen su bolsita aparte.

Hablando de conectores, son uniones de “bolita” y vienen en tres medidas diferentes. Ya vienen unidos y gracias a la textura rugosa que le da la impresora el ajuste de la articulación es bastante bueno.

Las piezas están hechas de plástico de color y nada tiene aplicaciones de pintura.

Las piezas del Pilder (el planeador) son las más pequeñas junto con los cuernos, y están hechas en otra calidad porque son menos rugosas en su acabado, al igual que las placas del pecho que son casi lisas.

Los puños no tienen mucha definición en cuanto a detalles pero son reconocibles como puños. Uno de los puños no tenía bien hecho el hueco para el conector y tuve que taladrar un poco para poder usarlo.

Cuando quise conectar los antebrazos me encontré con que faltaba el hueco para meter el conector. Solo había que retirar una especie de tapita. Supongo que es algo que hace la máquina para poder darle forma a la pieza.

Con los hombros pensé que pasaba lo mismo porque el antebrazo no tenía mucho espacio para encajar. Posiblemente era así y solo había que pegar el antebrazo, pero igual quise probar y usé un punzón para agrandar el hueco.

Pude escarbar para darle más profundidad al hueco, aunque no fue tan fácil. El material que lo rellenaba era menos denso que el del exterior, pero seguía siendo muy resistente. 

Eso me da pie para explicar cómo funciona la impresión 3d. Básicamente la máquina va tirando un filamento de plástico y va dibujando la pieza capa  por capa formando una trama que va generando el volumen de la pieza. En el antebrazo se pueden ver las líneas de plástico que van formando el volumen.

Entonces llegué a la parte donde me faltaba una pieza. Un cilindro que conecta la cintura. El vendedor suele vender la figura armada y esas partes van pegadas por lo cual olvidó incluir esa pieza. Decidí no esperar por un repuesto y reemplazarla con una pieza de plástico reciclada.

Se supone que los conectores van pegados dentro de cada pieza, pero decidí hacer una prueba antes de pegarlo definitivamente. Como algunos conectores quedaban algo flojos usé pedacitos de papel para rellenar y lograr que ajusten bien las uniones.

De todas formas quedó bastante flojo para mantenerse parado. Las placas del pecho fueron pegadas pero se salían con facilidad. La recomendación es pegar todo con súper pegamento del tipo cianocrilato. En algunas partes dio resultado, pero en otras necesitaba mucho para rellenar el hueco y lograr un buen ajuste, por ejemplo en los pies. Finalmente usé una pistola de pegar de las que usan barras de silicona y con eso el ajuste fue perfecto.

Modelo terminado. Así levanté los brazos cuando por fin pude hacer que se mantenga en pose por sus propios medios.

Hablemos del diseño. “Low poly” implica que es un diseño con baja cantidad de polígonos. Algo así como comparar los primeros diseños en 3d de, por ejemplo, PlayStation 1 con los actuales.

Las piezas son simétricas y en el torso el frente y la espalda son iguales, salvo el pecho que cuenta con huecos para sostener las placas.

En cuanto a articulación, bueno, no es un Soul of Chogokin o un Revoltech, pero es más articulado que un gashapon o algunas figuras de vinilo.

Le di unos toques de pintura rápidos con un marcador negro fino y pintura acrílica para la cara. También le di unos toques al Pilder. En algún momento haré un trabajo mejor.

El pilder se conecta a la cabeza con un pequeño cilindro de plástico. Se supone que va pegado pero me gusta la posibilidad de poder retirarlo (aunque eso implique la posibilidad de perderlo).

En la parte de atrás de las placas pectorales puede verse la textura de la impresión. No me hubiera molestado si se vieran así por el frente pero igual se agradece el esfuerzo de hacerlas lisas.

Volviendo al pilder, las hélices van pegadas al igual que la aleta superior. En realidad la aleta se inserta en una ranura y ajusta bien, por lo que no le puse pegamento.

-¡Planeador abajo!

Para que se den una idea de qué tan chico es comparado con el robot, es casi del tamaño de la cabeza de Mathilde.

-¡Fuego de pecho!

 Los hombros giran 360 grados, los brazos pueden abrirse un poco, codos y rodillas son muy limitados en movimiento, y las caderas y tobillos tienen un poco más de movilidad. La cabeza no tiene movimiento.

 Pese a su tamaño y que las piezas son macizas no es muy pesado, y puede mantenerse en un pie. Posiblemente sea esta la pose más dinámica que puede lograse.

-Thunder break! No, ese era otro Mazinger…

 Desde luego que puede hacerse lo de “puños fuera”, pero es probable que se termine aflojando la unión de bolita.

El puño es de un buen tamaño.

Con sus 24 cm y medio es bastante imponente. Supongo que a algunos pueda molestarles el diseño “poligonal”, pero tiene su encanto. Incluso la textura producto de la impresión le da un brillo particular. Queda con un brillo satinado, no tan adecuado para un robot gigante de metal pero que da una sensación de imagen generada por computadora. Incluso vi varias fotos que pensé que eran CGI pero en realidad eran el muñeco en cuestión.

-Haces que me vea gordo.

Comparado con uno de los Transformers más grandes de mi colección. A su lado Ultra Magnus se ve ancho. Listo para empezar una dieta de energon.

-¿Bestia mecánica? No, yo más bien soy un lagarto radioactivo.

Comparado con otro ícono de Japón, Godzilla, que es la figura más grande de mi colección.

Mathilde cumpliendo mi sueño de la infancia y supongo que el de muchos.

Conclusiones y calificación:

Hay cientos de versiones mejores y para el gusto de todos los coleccionistas.

Pero… yo tampoco tuve un Mazinger. En argentina en la década del 80 Playful (industria local) fabricó a Mazinger y a otros robots de la serie. Los muñecos compartían el mismo molde y las variaciones eran las mínimas para poder diferenciarlos. Poca articulación y plástico de dudosa calidad (hablo del Playful, aunque hasta ahora suena similar a este low poly). De chico pude tener uno en mis manos y aunque no me gustaban la forma de los puños ni los ojos era Mazinger Z y no había nada mejor. ¡Y además disparaba los puños! Esa fue una de las razones por las que mi señora madre no quiso comprarme uno. La otra supongo que fue el precio pero… ¡La seguridad primero!

A lo que voy con todo eso es que como fanático del personaje y del plástico barato no puedo ser imparcial con este Mazinger. Es el primero que tengo y me gusta. Y se puede conseguir para descargarlo e imprimirlo a un precio relativamente bajo. Y es mazinger Z.

¿Qué más se puede pedir?

(Máximo 5 Mathildes)

Bonus track: fotos del mazinger de Playful aquí: http://juguetesdecoleccion.com/muneco-mazinger-de-playful/320/

Proceso de impresión de un Mazinger gigante (video): https://www.youtube.com/watch?v=7ka28hhzRAs